martes, 5 de octubre de 2010

Ya han sanado las heridas

Cuando la música y las risas hayan pasado
y la soledad te abrace bajo las cobijas,
recordarás que tuviste una amiga
que perdiste porque no vio como tú la vida.

No te lamentes por haberla perdido,
no preguntes de quién fue la culpa.
Vuelve a tus bailes, al comercio y las caricias
de aquellos con quien contrato de compañía pactaste.

Déjala inmóvil en tu recuerdo
si en algo quieres honrarla,
porque no confía en las buenas intenciones
y sabe que con ella te lavarás las manos.

Espero que no te falte nunca nada,
que tu andar no se vare en el camino,
tu corazón ya sanado encontrará siempre
la manera de lidiar con los tropiezos.

De mí, quedará sólo el recuerdo
de un ser extraño que contigo caminaba,
ahora no sólo extraña, sino alienada,
vuelvo feliz por las rutas que conozco
habiendo aprendido de ti algo,
esperando aprender de muchos otros.

Por mi parte he aprendido
-además de lo que otras veces te agradecí-
que los deseos de un ser humano
no son lo que manifiesta en sus momentos de tristeza,
sino lo que busca en sus momentos de alegría.

2 comentarios:

  1. Como siempre... "vug es muy excentrica...", muy valiosa, muy poco de este mundo, ajenisima al monton.
    Yo no aplico para mi generacion, tu tampoco para la tuya, no pretendo causar empatia, solo te cuento que no estas sola... lo sabes, me conoces...

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