Cuando vuelva a terminar los dos meses y medio en aquel pueblo, lejos de mi ciudad natal en varios aspectos, sobretodo en las distancias relativas, tal vez me lamente con los bonitos renglones de Kafka:
"La ciudad está lejos de aquí y si hoy amenazara morir de nostalgia, nadie podría llevarme."
Preparativos para una boda en el campo, Franz Kafka
Hola Laura, es que me parece o siempre soy inoportuno. siempre que vuelvo a escribirte, estas pasando por algo difícil en tu vida. Te deseo toda la fuerza del mundo!!! cuando vuelvas a ese pueblito tendrás las fuerzas renovadas, demostraras que fuiste vencida por las dificultades y seguro te darás cuenta del fruto de tu labor, te darás cuenta de lo mucho que te extrañaron y del huequito que dejaste en esos pobladores para los que ya eres su doctora.
ResponderEliminarSigue sonriéndole a la vida. chauo.
Yo creo que es que tenés cierto sexto sentido y por eso llegás justo cuando estoy pasando por algo difícil. Es curioso y me alegra que aparezcas en estos momentos. Supongo que es cierto que no existen las casualidades. ¿Ves que vos sos el principito y yo el aviador? Gracias. Chau
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